“Sabemos lo difícil que es el baloncesto en silla de ruedas, pero uno de nuestros fans, Matt Scott, hace que parezca fácil. Este verano estará en los Juegos de Río”. Estas palabras se las dedicaron los Harlem Globetrotters al que para muchos es el mejor jugador de baloncesto en silla de ruedas.
Como este equipo de ensueño, Scott también divierte a sus fans por su
facilidad para anotar triples desde cualquier ángulo. Este enero
impresionó a todos con una serie de triples durante un partido que se
convirtió en viral.
los jugadores con mejor palmarés en la historia de este deporte. Pero
su carrera bien pudo ser diferente. Cuando nació, Matt fue
diagnosticado con espina bífida, lo que significa que la médula espinal
no se desarrolla hasta el final. Nacido en la década de 1980, los
médicos de la época no tenían esperanzas de que fuese a tener mucha
movilidad, pero pronto les hizo ver que estaban equivocados.
Cuando tenía 14 años comenzó a practicar el baloncesto en silla
de ruedas y ahí comenzó una aventura maravillosa. Su crecimiento fue tal
que le permitió ser reclutado en 2004 para estar en el equipo de EE.UU.
en los Juegos Paralímpicos. Posteriormente siguió su carrera en la
Universidad de Wisconsin-Whitewater, hasta que en 2007 ayudó a su
selección a ganar el oro en los Juegos Parapanamericanos.
Esa victoria le hizo convertirse en una estrella a nivel nacional, hasta
el punto de ser captado por Nike para protagonizar un anuncio. En “Sin
Excusas”, relata los múltiples motivos por los que alguien podría
desistir a la hora de practicar el baloncesto. Al final se revela que
Scott está en silla de ruedas.
Tal fue su éxito que acabó siendo nominado a los premios ESPY como
Mejor Atleta Masculino paralímpico. Estuvo en los Juegos de Pekín 2008,
justo después de comenzar una nueva andadura en Turquía para jugar
profesionalmente en el Galatasaray. Allí también tardó poco en
convertirse en una estrella. En el primer año ganó el título IWBF,
máximo título continental de baloncesto en silla de ruedas. Durante su
estancia ganaron todos los años excepto uno.
En la actualidad juega para el GSD Porto Torres, aunque su sueño
sería hacerlo en su país. Para eso necesitaría que se crease una liga
profesional de su deporte en Estados Unidos, algo que no parece muy
probable. Los Juegos de Río son una nueva oportunidad para
reivindicarse. Su figura y repercusión deberían ser suficientes para que
al menos se lo replanteen.
https://youtu.be/q6pNgSot6tc
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